El 12 de octubre, nos sumergimos en la celebración de la festividad de La Virgen del Pilar, una de las advocaciones marianas más veneradas y emblemáticas de la Iglesia católica.
La historia de esta devoción se remonta a los albores del cristianismo, específicamente al año 40, cuando se cuenta que el Apóstol Santiago, mientras predicaba en Hispania, tuvo una visión sorprendente de la Santísima Virgen María en la ciudad de Zaragoza.
Según la tradición, la Virgen María se apareció al Apóstol Santiago sobre un pilar de jaspe y le encomendó la misión de construir un templo en su honor en aquel lugar sagrado. Siguiendo las indicaciones divinas, se erigió la primera capilla en ese mismo sitio, convirtiéndose en el punto de partida de la devoción mariana en España.
La imagen de la Virgen del Pilar, que se venera en la Catedral Basílica del Pilar de Zaragoza, es una talla en madera dorada de estilo Gótico tardío franco-borgoñón de hacia 1435 atribuida a Juan de la Huerta, imaginero de Daroca.
Descansa sobre una columna de jaspe forrada de bronce y plata y cubierto, a su vez, por un manto desde los pies de la imagen de la virgen hasta la base vista de la columna o pilar, a excepción de los días dos, doce y veinte de cada mes en que aparece la columna visible en toda su superficie, evocando la visión del Apóstol Santiago.
En España, La Virgen del Pilar ocupa un lugar central en la vida religiosa y cultural del país. Es considerada la patrona de la Hispanidad y de la Guardia Civil, y su festividad se celebra con gran entusiasmo en todo el territorio español.
Zaragoza se transforma en un epicentro de devoción, con peregrinos provenientes de todas las regiones del país y del extranjero, acudiendo a venerar a la Virgen y participar en las festividades en su honor.
Este día es una ocasión propicia para reflexionar sobre los valores que La Virgen del Pilar simboliza. Su imagen es un símbolo de fe, esperanza y protección, representando la maternidad divina y el amor incondicional de María hacia la humanidad. La Virgen del Pilar es considerada un faro de luz y guía en momentos de dificultad, y su intercesión es buscada por aquellos que buscan consuelo espiritual y fortaleza.